Chile aun dependía de la Corona española y ya se realizaban en estos predios agrícolas las costumbres de la vida cotidiana del campo , una de ellas era el abastecimiento de alimentos y también vino tanto para consumo propio como también su venta en los poblados más cercanos tales como San Carlos y Chillan

La no existencia de productos elaborados industriales que hoy es común conocer, hacía que cada casa tuviera su propia fabricación por excelencia, esto en el sector vitivinícola continúa inalteradamente hasta hoy.

Es por esto que el sector de Quimpeumo ( fundo aledaño a San Carlos) y San Pedro son tierras cuidadas y en cierto modo virgen de la agroindustria actual.

Esto nos otorga un sello inigualable el cual da vida a nuestros productos libres de contaminación y bajo una producción de boutique.